Me siento débil…. Y estoy enfadado con el mundo, y todo porque soy tan tonto como para no poder mirarte a los ojos…
Ya no lo aguanto mas quiero tirarme al suelo y quedarme allí sujeto para siempre.
Me duele el pecho… en realidad, no se lo que me duele ya de tanto llorar y quejarme a mis amigos invisibles.
Ójala llamases a mi puerta, pero no lo haces.. ¿Por qué?.
Entonces, con esa idea en la cabeza rompo a llorar mientras me pregunto si algún día podré decirte cuanto te quiero.
Han pasado ya varios días en los que ni te has dignado a mirarme, y estoy empezando a pensar que no debería de haberte querido tanto, que no tenía que haber dejado que ese sentimiento llamado amor… me invadiese por dentro.
Ahora soy libre , y no me aferra la idea de estar contigo , porque… a lo mejor es cierto que no te merezco, pero si algo me ha quedado claro es que tu tampoco me mereces a mí.
Y ahora con la conciencia tranquila dejo que mis sentimientos fluyan en mi interior, y que la rosa de mi corazón florezca de nuevo.
Ya no voy a esperarte.. al menos hasta que la herida que me has hecho con tus rechazos desaparezca para siempre..
