Y solo espero.

Amanece, un "Buenos días, princesa" que cada día estoy más contento de decir, sonrío, sonríes, yo soy tuyo, tu eres mía, y cada vez estoy más feliz de serlo.
Porque cuando sonríe, el mundo se pinta, porque hace que los problemas parezcan insignificantes, ocupa todo, lo es todo y mi mundo se derrumba...
Mientras que mi mundo se derrumba por tí, para tí, me ilumino, me importa ya todo tan poco...
Estúpido el que no me vea sonreir, y es que, te quiero tanto que duele no haberte conocido antes. ¿Nunca habeis tenido ese sentimiento?
Una mesa interminable de confianza desmesurada, que duerme a veces, pero sigue ahí, lo se.
Puede haber ratos en los que puedas cuestionarme, discutirme, pero nunca odiarme, por que si me odias, me quedaría sin razón por la que despertarme cada mañana.
Sí, te lo digo yo, verte merece la pena, tenerte lo hace todavía más, y yo te tengo y tu me tienes, yo te canto yo te espero, porque estaré aquí hoy, mañana y pasado, igual aquí, para tí, esclavo de tu sonrisa, esa sonrisa que ojala fuera para mi entera, dedicada, personalizada.
Podría estar mirándote mil años sin cansarme, quiero prometerte un para siempre jamás y soñar con que se puede, los imposibles también existen ¿Verdad?
Todas las noches me despido con ganas de saludarte y no quiero terminar.
Y no sabes todavía lo que es quererte, aunque estemos separados, seguiremos mirando la misma luna-
Quien este leyendo esto ahora mismo, tú ,lector anónimo, pensarás que estoy atontado, que soy un "cursi" y que estoy loco, y es verdad, soy un tonto enamorado de sus besos, de sus caricias y de su sonrisa, estoy loco por ella ¿Qué puedo decir? Ah sí, te quiero.
Y solo espero poder seguir diciéndote todos las mañanas de mi vida al oído "Buenos días, princesa".

Gracias.

Suena la guitarra, se levantan todos los demás instrumentos, cada vez la música se va apagando más... Y sigo esperando, sigo recordando todos esos momentos como si fuese ayer, sin poder evitar sonreir, sin poder explicar como me sentía cuando estaba contigo, supongo que no podré hacerlo nunca, las palabras nunca serán suficientes para agradecerte lo que has hecho por mí.

Me has dado fuerzas, me has enseñado quien era de verdad, que merezco un poco la pena, y que la próxima vez que me derrumbe tendré a alguien que me ayude a superarlo, alguien por el que merece la pena levantarse, por ver esa sonrisa tan  maravillosa que hace que todo mi mundo se vuelva patas arriba, y que gire y gire como una peonza, espero que nunca deje de girar...

Ya puedo mirarme a los espejos y sonreir, no seré "el más guapo" ni "el mejor" en nada, pero para tí si lo soy, y eso me es suficiente.

Perdamos tiempo haciendo nada y haciéndolo todo, mírame a los ojos, esos ojos que me miran y me dicen que me quieren, esa mirada con la que nadie me había mirado antes, y es que ahora necesito más que nunca esa mirada, esos brazos que me abrazan pidiendo más, cuando apoyas la  cabeza en mis hombros y sonríes... estaba tan contento, estaba tan feliz... 

Solo te pido que vuelvas algún día, me sonrías y me digas "todo está bien, te he echado tanto de menos..." y que nos recorramos las calles de Madrid entre risas y tropiezos, mientras, seguiré recordando y recordando momentos, no se ya cuanto tiempo hace de la última que nos vimos, pero  al imaginarte, me sigo enamorando.

No te olvides de mí, te necesito.

Ahora acompañame a este escenario que cada vez es más pequeño y en el que cada vez me siento más solo, todo lo que soy, todo lo que alguna vez quise ser, lo he conseguido contigo, no se cuando ni donde te veré la próxima vez, pero te buscaré... y nos tumbaremos olvidándonos del mundo, ¿Verdad? 

Y el telón se cierra, mientras pateo el suelo, recordando.

Era el mejor de los momentos...

Era el mejor de los tiempos siempre contentos, siempre felices, siempre nuestros.
Ahora soy el fantasma que repasa con tinta negra los recuerdos de lo que quedó olvidado en el pasado.
Repaso con tinta tantos momentos, bailo solo una canción para dos, ¿No me vas a acompañar en esta?¿ Ni en la siguiente?, ¿Todo ha terminado?
Esto me esta matando, esta arrancando cada lágrima, y duele tanto, dios mio duele mucho.
Sigo bailando, tropezando con recuerdos, con sonrisas, con abrazos, tropiezo y arraso con todo, esos trozos rotos de una historia de amor que ya se me antojaba lejana.
Y sigo estando yo solo y la soledad como acompañante, la habitación que rellenabas con tu sonrisa esta vacía y es muy grande ¿Así se siente alguien cuando esta solo?
Por favor te lo pido, lo ruego de rodillas alto y claro no imagino que nadie pueda ver mas allá de lo que tu lo haces, por favor no me olvides, quiereme, quiereme tanto como yo a tí, te quiero tanto que duele, y duele mucho ahora mismo.
Siempre he sido un pico de oro para decir lo que no tenía que decir, porque el enfado me lleva a niveles de histeria que no controlo, pido perdon por lo que dije, por lo que he dicho y alguna vez podré decir...
Veía el futuro tan brillante, lo veía como si estuviese hecho para mí, estaba grabado a fuego en mis ojos, todo lo que pensaba que iba a hacer estabas tú al lado.
Sigo sin comprender como ha pasado, estabamos tan bien, pero esta claro, cuanto mas arriba estas mas dura es la caída, yo creyendo que nuestro vuelo era estable...
Tantos momentos que se escapa  entre lágrimas, tantos besos robados que todavía saben a tí, esta claro si que era el mejor de los tiempos pero el peor de los momentos.

No me dejes caer.

Creo que cree que no le quiero, que le digo a todo el mundo lo mismo, que escribo a todo el mundo lo mismo...

Alomejor soy yo, que nunca cambio, que he hecho algo mal, fuera como fuere, prometo cambiarlo, hacerlo mejor la proxima vez.

No quiero que te canses de mí, aún no por favor, nunca he sentido esto antes, o almenos no tan fuerte, no tan real, ahora estoy aferrandome a tí con todo lo que tengo, con todo lo que soy.

No me dejes caer, no me dejes caer, ahí abajo está muy oscuro, por favor no me dejes caer.

He estado mucho tiempo ahí, en esa guarida que tiene como líder a la mismísima soledad, he estado demasiado tiempo, no quiero volver, te prometo que cambiaré, te lo prometo, solo dime que estoy haciendo mal...

Pendo de un hilo y  querría soltar a los cuatro vientos como me siento ahora mismo, estoy exultante, nunca, jamás me había visto así, pero ahora más que nunca también es cuando más peligro tengo de caer, no me dejes caer, por favor, no me dejes caer.

Yo se que canso que soy molesto a veces... Lo cambiaré, todo lo cambiaré por tí, nunca había sentido este sentimiento de culpabilidad por ser tan imperfecto, por no darte lo que necesitas de verdad, te prometo que lo haré, solo dime en que me estoy equivocando.

Es extraño a veces pienso que no soy nada para ti, otras sí,  luego vuelvo a pensar que no valgo nada, y se repite, somos agua, la cuestión es ¿Ese será nuestro ciclo?

No entiendo, no entiendo nada,  cada cosa que escribo, que te digo, esta pensada, esta meditada, todo para que sea perfecta, debe de ser que una persona tan imperfecta como yo no puede decir las cosas perfectamente normales que dice alguien con dos dedos de frente.

¿"No te ralles" es sinónimo de "no me quieras"? Yo lo único que quiero saber es como puedo ser la razón de tu sonrisa, al menos de vez en cuando, y ahora, por favor, no me dejes caer.

Porqué.

Nunca me había dado cuenta, de lo bonito que es besar, al principio, inseguridad, luego poco a poco, solo amor.

Esto me recuerda que un simple beso puede bien no significar nada, ser un simple beso, la unión entre dos personas, no va más allá de la lujuria personal, bien puede serlo todo, dos personas que se quieren tanto, que entre beso y beso se sonríen, se miran, se desean, se dicen todo lo que sienten, mientras caricia a caricia se van aliviando las penas del día a día... 

Ahora creo que se lo que se siente cuando la gente habla de amor, eso que a veces parece una vieja leyenda, y luego nos sorprende de golpe, como cuando te salpican con agua fría en medio de invierno, te quedas parado, no sabes que hacer.

Se que te quiero, pero si me pides que te enumere todas y cada una de las cosas por que lo hago, no sabría que decirte, veamos, por lo menos a esa pregunta, no necesito la ayuda de nadie:

Se que te quiero porque al imaginarte, sonrío.

Porque eres lo primero en lo que pienso al despertarme y lo último que pienso al acostarme.

Porque cuando te beso, no es mi vida con la que me encuentro, olvido los problemas, estoy más allá, en un sitio mejor, ahora nada es inalcanzable ¿No? por lo menos te quiero por hacerme pensar que algo mejor es posible.

Porque por cada tres palabras que salen de tu boca, cuatro me hacen sonreir.

Porque cada vez que te miro, estoy igual de nervioso que la primera vez, no se como expresarlo con palabras, tampoco con hechos.

Porque ahora se a lo que la gente se refiere cuando dice que siente  "mariposas revoloteando en el estómago"

Porque cuando me miras, me haces sentir mejor persona, que valgo algo.

Y mientras, tu sonrisa me invita a comerme el mundo, mirando hacia delante, con la cabeza alta.

Porque cada vez que cierro los ojos te veo allí, y como un niño, intento imaginarme a tu lado, cogiéndote la mano.

Porque de vez en cuando abro los ojos para ver si sigues ahí.

Porque sueño con tus besos, tus caricias, tus abrazos, tus "te quiero"...

Porque eres tú y solo tú la razón de mi sonrisa.

Y anhelo, quiero, deseo, que sepas, aunque sea que comprendas, cuanto te quiero.

Un futuro, mientras, un presente.

Cinco, cuatro, tres ... cuento y recuento, los días que me faltan para verte, prometo no ser muy pesado.

Pero si alguna vez he encontrado algún momento más feliz que este que venga Dios y me lo replique.

Llevame a donde estes a ese cielo coloro, donde las sonrisas parecen multiplicarse por cien...

Lo más importante, dicen que esta entre líneas, llevo un mes leyendo entre líneas cuanto te quiero, en algún momento te lo tenía que decir.

Después de este momento nunca seré quien había sido, y no lo olvidaré, no lo olvidaré, te lo prometo.

Porque algún día espero poder vernos de mayores sentados arrimados el uno al otro, dados de la mano, pelo canoso que cubra nuestros ojos aún ilusionados como si fuese la primera vez.

Alomejor, alomejor, quien sabe, no lleguemos a tanto, pero al menos intentándolo... espero estar presente en cada una de tus sonrisas.

No se que decir, te tengo tan cerca que espero poder respirar al menos, quiero parecer que estoy vivo, para saber que no es un sueño.

Respiro tan fuerte que creo que se me ha olvidado... y es que cada vez que te veo es como si fuese la primera vez, tan especial, tan como tú, que hasta la perfección te tiene envidia.

Estaré ahí a las buenas y a las malas, por que me prometiste los mejores momentos a tu lado pero también las batallas mas duras, quiero ese día sin fin para nosotros, y al despertarme que me beses como si fuese tu desayuno.

Solo quiero que entiendas, que estas mariposas me estan matándo, sigo queriendo llegar a ese paraíso donde te encuentras...

Mientras, las mariposas siguen molestando, empujándome a decir lo que tendría que decirte cada día: Te quiero, te quiero, te quiero... dos, uno..

Cuatro meses.

Hace tres meses y treinta días me dí cuenta de que eras algo más que una amiga, se supone, que no sabes si estas enamorado de una persona de verdad, hasta los cuatro meses. 

Llevo varias semanas intentando olvidarte, dos días ignorandote sin resultados, una hora pensando que esto no debería estar pasando, y toda mi vida recapacitando.

Mañana se cumplen cuatro meses, y todavía tengo la esperanza de que al despertarme por la mañana, solo quede el mero recuerdo de un encaprichamiento.

Ángeles de fuego que recortan mi imagen de la vida con tu figura, estas en todas partes, hasta cuando cierro los ojos.

Y cuando ya no estas, cuando cierro los ojos y parece que estas lejos, me sonries, o vienes a hablarme, me duele ¿Sabes?.

Miro por la ventana, esperando cruzar miradas y que de tu boca salgan esas ocho letras que a tanta gente hacen feliz, a tanta gente, al parecer, no estoy en la lista.

Si supieses cuantas cosas no te he dicho, cuantas cosas te tengo que decir, que explicarte.. si supieses las ganas que tengo de abrazarte cada vez que te veo, si supieses la necesidad que tengo de que me digas que todo va bien, que estarás ahí pase lo que pase, si supieses...

Y no lo sabes ¿Cómo decirlo? Esto es imposible, no hay manera ni vía posible para superarlo, solo toca esperar a que deje de llover, esperar, debajo de la sombra, esperar a que en algún momento se torne soleado...

Quizá sea mejor pasar toda la situación por alto, quizá estoy perdiendo el tiempo, que es lo más seguro, quizá debería de olvidarle, pero quizá y solo quizá, valga la pena.

Quiero olvidarte.

Cuando estoy nervioso, tengo qe aceptar que hablo demasiado, me olvido de las consecuencias y hago que todo gire alrededor de mi, y solo quiero alguien que me entienda, que me escuche.

Y odio que no haya marcha atrás, que siempre me acabe arrastrando por todo el mundo, quiero que por fin alguien me pida que me levante después de haber estado tanto tienepo arrastrandome.

Quiero a alguien que me quiera como yo quiero que me quieran.

Y odio hacerte pensar que conmigo no es posible, que hay portones cerrados entre los dos, pero ¿Qué quieres que haga? ¿Que derrumbe esos portales? ¿Para después tu destruirme a mí?

Seguiré creando bloques de cristal que te permitan ver lo que me sucede en cada momento, que te permitan ver como estoy por tu culpa.

Porque soy yo el que siempre acaba igual, no quiero que me olvides, quiero olvidarte yo, que desaparezcas de mi cabeza, no eres mi conciencia, pero a veces me confundo.

Es una caja, estoy encerrado, y la odio, odio que en las cuatro paredes de la caja este tu cara sonriendo, odio que no se rompa por mucho que la golpé y odio llorar mientras me mira tu foto en la pared de la caja de cristal... ¿Me estas viendo? ¿No? Entonces… ¿Por qué no me sacas?

La vida es bella.

Nunca supe considerar

el lado bueno de las cosas.

No supe decir la duración de la noche

pues desafortunadamente

eterna se me hacía.

¿Quién soy? ¿Qué hago aquí?

No pertenezco más que a la luna

aquella que inspira vigilando

la creación de Dios.

Y cuando todo se ha acabado, 

Cuando la esperanza alejada queda.

Sonríe un niño

Y como un foco de esperanza

la oscuridad iluminada queda.

La luna asombrada 

parpadea iluminada, 

un rayo de luz, 

asoma la creación de Dios.

Se oyen risas, se oyen llantos,

Como una de cal y una de arena

Que desencadenan el ciclo,

el ciclo de la vida.

La luna ya no observa, actúa

Ilumina como una sonrisa.

Ella también esta feliz,

Y como siervo suyo, sonrío también.

Mientras, poco a poco

la creación se Dios fue aprendiendo

a amar la vida,

con sus pros y sus contras.

Aprendímos como eran las cosas.

Y la luna dijo: La vida es bella.

Días de color.

Otro día lluvioso en este mundo gris, donde el sol no calienta, lo sonidos son sordos y nuestra voz es muda.
Camino viendo a la gente pasar, observando los pocos creenciales que les quedan, en eso nos parecemos, ya no queda esperanza para nosotros.
Y sigo caminando, los colores tornan a un sepia claro, mientras cada uno se pierde en su mundo, recordando colores pasados.
Andamos sin rumbo fijo esperando que el camino se termine alguna vez, intentando aguantar unas lágrimas que no mojan.
Cada uno intenta entonar su canción favorita, intentando sonarr alegres, pero lo único que sale son sollozos aguantados que buscan un hombro sobre el que llorar, y siguen caminando.
Siguen caminando por este mundo de colores sepia, sin voz, sin aire, sin lágrimas, sin esperanza, intentando retonar a lo pasado que, aunque era difícil, era feliz, un pasado con color, en el que las canciones sonaban alegres.
Mientras el frío de la lluvia me salpica lloro en silencio, intentando que por fin alguien escuche mi voz.
Esa voz que suena tan ausente, pero que con tanta persistencia pide color, el color de un pasado más feliz.

Una noche cualquiera.

Subido a la silla de mi habitación, asomado a la ventana abuhardillada  de esta, viendo como caen las gotas de lluvia, pequeñas y vulnerables pero que se hacen oir al chocar contra el cristal.

Abro la ventana y dejo que el aire fresco de la calle me inunde, mientras a mi olfato llega el olor a mojado, y mis ojos ven las gotitas hacer chorros de agua que caen en forma de goteras al duro asfalto.

La brisa es suave, como cualquier noche de principios de Primavera, y no es noche completa, ya que farolas y edificios hacen de la noche, un día con menos luz de lo habitual, no hay ningún coche en la carretera, ningún ruido fuera de lo habitual, solo el murmullo de la lluvia que cae de un cielo nuboso. 

Y pasa un coche, lentamente, no tiene prisa, es más, parece que como yo, el conductor del vehículo esta disfrutando de esta noche.

Cruzo los brazos y apoyo la cabeza en ellos, miestras mis pies estan apoyados en la silla, tambaleantes y adormezidos, pero  tiesos, ya que ni ellos quieren que me pierda este momento.

Una gota se cuela en mi habitación y se resvala escurridiza por mi nariz, esta fría, me hace cosquillas, pero no me muevo, quiero que siga su trayecto.

Y cuando esta justamente al borde de mi nariz, se desace como si no hubiera existido nunca, dejando una estela fría a lo largo, pero no es un frío molesto, es un frío acojedor, que te invita a abrazarlo, a querer más, y mientras tanto, más gotas de una lluvia que se antoja infinita ante mis ojos cae sin parar.

Bostezo y me voy despidiendo de mi acompañante de noche que ha sido el agua, de mi pequeña vigilante que es la luna, y de mis observadoras las estrellas, mientras miro al cielo me relajo, pensando en que todo es posible.

Y el olor a mojado se va desvaneciendo poco a poco, mi ventana se cierra con un leve crujido, bajo la persiana y dejo de ver a la lluvia, me meto a la cama, aparto el edredón, me acurruco a un lado, haciéndome un buruño y cuando cierro los ojos y dejo de escuchar mis pensamientos , empiezo a oir de nuevo el toc-toc de la lluvia en el cristal.

En el punto de mira.

No soy nada, o almenos, soy lo que queda de mí.

La frase sería: No soy suficiente.

Y ahí estoy en el punto de mira del almirante de un barco velero, que por más que hago, no aparta el catalejo de mí.

Alomejor tiene que derribar mi barco y esta esperando al momento justo.

Alomejor es el enemigo, que intenta saber todo sobre mí.

O alomejor solo es alguien que quiere conocerme, que esta esperando paciente a que vuelva a ser como antes, a que me recomponga como un barquito de madera azotado por las caprichosas olas.

Intentaré llegar hasta él, espero que este igual de cerca de lo que parece estar...

Y así es, no hay casi distancia pero en el último momento dudo, como siempre, y no me atrevo a coger la escalera que me tiende con una sonrisa, desconfio y aparto la mano, intentando ser cauto cuando realmente no subo por miedo.

Y poco a poco, el barco velero del pequeño almirante se va alejando, aunque sigue mirándo con su catalejo dorado, no se porque lo hará, no valgo la pena.

Y esos pensamientos me llevan a la desesperación más profunda, que originan torbellinos de amargura en el agua del mar, torbellinos que resquebrajan mi bote, mi pequeña ancla a la vida, y la madera cruje, el banco se rompe en dos, y como en toda película el barco se hunde, llevándose consigo todo lo demás, y me quedo en el mar de escombros que he formado, sin pensar en nada, unicamente floto en unas aguas mas turbulentas de lo que me gustaría que fuesen.

Me da por mirar allí donde había estado el almirante, y aunque se que se ha ido, me viene a la cabeza su imagen sonriendo, señalando en dirección contraria, miro allí donde me señala el dedo de aquel que sonrie, y de repente  el agua turbulenta parece más mansa, la desesperación se ha ido, y con ella los torbellinos en el agua plateada, veinte barcos veleros se aproximan imponentes, cada uno con una persona sonriendo en su proa, con un catalejo en la mano y saludando con la otra, invitando a que suba.

Y esta vez, el miedo se va, "no puede ser peor que esto" y subo al barco esperando un "hola" y para mi sorpresa recibo un abrazo, el abrazo de un amigo, que se que me tendrá en su punto de mira para siempre, preocupándose de mi, buscándome cuando naufrague, ayudándome a encontrar mi norte en un mar infinito.

No más.

Y me dijeron que aguantara, que pasase, pero cada vez me hundo más, y a mi alrededor no hay más que oscuridad. 

No pido ayuda, porque no creo necesitarla, lo único que pido es ser lo suficientemente fuerte como para poder aguantar la ola venidera, que se aproxima arrolladora con hambre de caos.

Que se que el mundo esta lleno de gente tanto buena como mala, pero maldita sea mi suerte que solo me encuentro con indeseables.

Tolerable que sea el listo capaz de aguantar esa ola de humillación, yo espero que arrase pronto, y que se vaya con la misma rapidez viperina con la que vino.

Suelto versos enlazados para sobrepasar con elegancia esta etapa de mi viaje, me ahorro lágrimas para parecer más fuerte, creyendo que llorar no es de valientes.

He intentando no llamar la atención en un mundo que tiene como suelo tambores, me escondo en mi mismo, esperando que no me vean pasar, y que así esas personas indeseables no hablasen de mí, siendo invisible para las malas lenguas que se clavan como puñales, sin sangre, pero que duelen igual.

Infinitos.

¿Quién no ha deseado nunca ser inmortal? Tener que morir a manos de un futuro  incierto es algo trágico y tormentoso, ¿Quién no querría vivir para siempre al lado de los que quieres? La idea de vivir para siempre destroza todo lo que pasa ¿Qué sería de mi cuando te viese cerrando los ojos en el fin de los días? No quiero, me gustaría vivir contigo para siempre, viviendo como humanos que es lo que somos, pero con la certeza de que tendríamos todo el tiempo de este mundo para ser felices el uno  con el otro.
Me gustaría saber cuando se me van a acabar las oportunidades, para no perderlas, para aprovecharlas al máximo, siempre seguro de que algún día podríamos saberlo todo el uno sobre el otro.
¿Quién no teme a la muerte? Estúpidos humanos los de hoy en día ¿Verdad? No creas que todo el mundo es igual, pero la gente piensa que pueden ser inmortales, pero la única manera de ser inmortal en este mundo
es hacer una proeza digna de llamarse heroicidad, que solo será valorada por unos pocos, aquella proeza es recordada por la gente de bien común, cuyo criterio es nulo, esas personas son las únicas que pueden llamarse “inmortales”
Es verdad también que muchas personas juran un para siempre (si es que existe tal cosa, me gustaría verlo), dentro de las cosas corrientes y normales podríamos destacar una o dos entre un millón, esas ocasiones que también se podrían llamar inmortales, los demás estaremos encadenados a un futuro desconocido por todos los demás, no quedaría nadie para recordarnos.
¿Y con esto que quiero decir? Yo te prometo un para siempre, esperando que me des un “ahora” que se pueda prolongar hasta un futuro menos incierto ,juntos, cada humano busca su destino con la persona que corresponda a sus ideales de “perfección”, y así hasta el fin de sus días, esperando ser recordados.
 Al jurar que somos infinitos nos estamos mintiendo a nosotros mismos pero tenemos la poca razón humana  para creer que todo es posible, y pensar que después de que esto pase, sigamos siendo igual de infinitos, por y para siempre.

Vive dejando vivir.

Esas veces en las que te sientes fuera de lugar, pero no sabes como decirlo, esas veces que te sientes solo pero no puedes dejar de estarlo, porque no sabes como pedirlo, esas veces que todos hemos vivido, pero que no podemos contarlo a nadie porque no sabríamos explicarlo.
Y ahí tirados alguna vez hemos estado todos, fuerade lugar, solos y perdidos, sin saber cual es el norte de nuestra vida, porque a lo que nos aferrabamos ha desaparecido, o puede que simplemente lo que haya desaparecido seamos nosotros...
Pero en realidad, sabes lo que ha pasado, lo que te ha hecho encontrarte donde estas, tirado, preguntandote seriamente si eres escoria, es porque lo único que haces es daño a la gente, no físicamente, sino con

palabras, presionando el jugoso dolor del ausente, del que ya no está, porque le has destruido, sin querer, pero lo has hecho.
Podrías empezar de cero otra vez, pero no quieres, nadie querría, porque no quieres hacer daño a nadie más ¿Verdad?, prefieres, prefiero, estar aquí tirado sabiendo que nadie vendrá a recogerme, así mejor, desde luego, el ser humano es así, egoista por naturaleza, egocéntrico, pero yo les entiendo, yo haría lo mismo.
¿El mejor consejo que daría? Pues este:
Vive para ser feliz, se feliz dejando vivir a los demás en su paz intrínseca, respetándolos, amándolos, como si de ti mismo se tratase.
Porque yo vivo, o al menos lo intento, sabiendo que algún día podré matar a alguien con mis palabras.

Querido Diario:

22/12/11 3 am, Querido diario: 

Otra vez lo mismo, se repite, he vuelto a caer, de lo que ya me libré hace tiempo..

Vuelvo a sentir lo mismo, no, miento, vuelvo a sentir, pero mas , mucho más, me gusta, mucho, me he enamorado, muchísimo.

He llegado a tal punto que creo que es obsesión, y no quiero que vuelva a pasar otra vez, porque siento que esto es mucho peor que lo anterior, si antes me parecía una tormenta, no quiero saber lo que me parecerá ahora, cuando todo pase.

Y lo peor de todo, o lo mejor, se mire por donde se mire, es que no quiero que termine. 

La distancia, la mierda de la distancia,es lo que nos hace muchas veces  "romper la conexión", y puede ser, como todo, puede ser, pero no quiero que pase, simplemente, últimamente me afecta todo mucho, pero también sonrío como  hace ya tiempo, me quedo em-bobado pensado en la mas boba, es irónico se mire por donde se mire.

Y grito, me revelo contra el mundo que me lleva a este límite ¿Y si no quiero mas? ¿Y si no lo soporto más? Cada vez que caigo en la tentación sigo callendo mas y mas hondo, perdiendo los sentidos, olvidando todo lo que alguna vez se dijo , de lo que alguna vez dijiste, se pierde, se olvida, es irónico que se me olviden esos "te quiero" tuyos, cuando tu sonrisa esta presente en mi cada segundo del día.

No soy suficientemente fuerte para levantarme otra vez después de esto, simplemente, puede ser, que no quiera levantarme ¿Podría ser que me gustase estar así?, no lo se, simplemente es irónico pensar en todo esto mientras todavía te tengo, ya habrá tiempo de pensar en ello, querido diario..

Luz que brilla por su ausencia.

Enseñame el final de esta calle, voy caminando, y no encuentro la salida, por favor, solo hasta la salida, estoy harto de estos de pie al lado de la misma farola apagada...

¿Dónde estas? Sigo aquí, esperando verte… por favor, sigo esperando en el mismo sitio en el que me dejaste ¿Cuándo fue el momento en el que dejé de verte de verdad?

Te dije que me esperases, que fueses valiente, que me esperases a que llegara el momento, por favor, por favor.. dije que todo estaba bien, que cuando estamos juntos me da por sonreir más ¿Dónde estas? ¿A quien estas queriendo? ¿Quien me encontrará? 

Sigo esperando a encontrarme, a que me encuentres, si no estas tú, no podré mirar al frente ¿Es que no lo entiendes? Por favor, por favor...

Trato de andar, doy un paso luego otro y después... aparezco en la misma farola apagada, sin luz que de un poco de sentido a este laberinto llamado vida, esa luz que solía aportar tu sonrisa, no puedo, no puedo, por favor..

Necesito que estes aquí, que me digas que sea fuerte, amable, y que me recuerdes quien era, y que sentido tenía mi existencia.. 

Vamos, por favor, vuelve aquí, llevame a la siguiente farola que esté alumbrada, necesito ver esa luz, tu luz, vuelve..

Es gracioso, me pareció verte a lo lejos sonriendo, y la farola debajo a la que estaba, se iluminó por un momento, brillando como hacía mucho tiempo que no lo hacía.

Amigos.

Si te miro, fingiré ser tu amigo, como siempre, aunque duela, aunque en mi interior esté deseando abrazarte, besarte, y decirte una y otra vez, cuanto te quiero.

Pero no, ahí estoy yo, de amigo, de apoyo moral en tus momentos difíciles, cuando tu no eres correspondido por otra persona ¿Qué ironia verdad? 

Todos los días, todos los días tengo que pasar a ser el amigo gracioso, al que no le molesta nada, ese soy yo, día tras día.

Sonreiré durante el resto de mis días, esperado que sonrías también, aunque lo único que quieras de mí sea desahogo, estaré ahí, como siempre.

Aunque esté destrozado como ahora, no me verás una lágrima, quiero que al menos tú, quien mas me importa, me vea contento, aunque en secreto esté pensando en lo feliz que realmente sería si tu sonrisa, fuese para mí, dedicada, personalizada, exclusiva, con ese algo que hace de mi sonrisa, tuya.

Y aun así, aunque mas o menos te figures que pasa, estaré ahí, como siempre, después de todo: ¿Para que están los amigos?

Culpable.

Ceniza, eso es lo que el pequeño podía imaginar que le quedaba de su antigüa vida.

Y se daba cuenta en ese momento, de lo que mas temía, su vida, había estado sujeta por columnas de mentira, nadie mas que el tenía la culpa de aquello, pero no siempre es fácil asumir las  consecuencias de nuestros actos, así que el pobre niño fue buscando culpable por donde asomaba, buscando culpabilidad en la inocencia, y arrastrando nada mas que soledad con él.

El niño siempre miraba para delante, nunca hacia atrás, porque eso es lo que recordaba  que le habían enseñado.

Siguió y siguío su camino buscando culpable con el nombre de nadie, pues se olvidó de quien era, de quien había sido, que había hecho, y siguió buscando.

Lo que antes era bosque, se había convertido en desierto, un desierto extraño, ya ni la arena le quería a su lado, pues el niño también había osado culpar a esta.

Iba caminando, sin rumbo fijo, cuando su soledad tiro de él, y se vió obligado a mirar atrás, y destrozado, siguió su camino "¿Todavía me queda algo?", se preguntaba el pequeño.

Se levantó cada vez que caía, y siguió buscando y buscando, ya no era nadie, unicamente era, lo que quedaba de su orgullo, insignificante con lo que había sido antaño.

Prosiguió el niño, con la soledad agarrada de la mano, hasta que sus pies se pararon solos.

De tanto arrastrar los pies, el suelo llegó a erosionar el pequeño apize de alma que le quedaba.

Y como en todo desierto, se provocó ante él una alucinación, había una especie de cristal y el niño, fue a ver  si el pequeño trozo  era el culpable de todos sus males, se asomó al espejito, y se derrumbó desolado.

Y después de verse reflejado, comprendió.

Busquémoslo.

Sabes que estas ahí, vivo, porque notas lo que ocurre a tu alrededor, y te importa, y a veces, deseas que todo acabe, que todo te dejase de importar.

Quieres un final feliz, un final  de película, inesperado, que te haga pensar sobre las cosas de la vida, simples y al mismo tiempo complejas, en el que, pese a todas aquellas cosas que salen mal, todo el mundo esta alegre, sonriente, porque todo ha acabado..

Cogerle la mano a alguien, y caminar y caminar... hasta que llegue la hora.

Pero ¿Cómo sabrás que se está acabando? No lo sabes, es gracioso pensar que como alguien dijo "Hay que vivir cada día como si fuese el último", muchas veces no hacemos caso del consejo, ¿Y si fuese verdad?

Va a empezar tu estribillo, el estribillo de tu vida, de la mía, aprovechémoslo, sin contar con fallos, sin contar con malas decisiones, sin contar con finales felices, creémoslos  nosotros mismos.  

Y seguro que aquello llamado destino,  nos deparará a tí y a mí ese final feliz.