Suena la guitarra, se levantan todos los demás instrumentos, cada vez la música se va apagando más... Y sigo esperando, sigo recordando todos esos momentos como si fuese ayer, sin poder evitar sonreir, sin poder explicar como me sentía cuando estaba contigo, supongo que no podré hacerlo nunca, las palabras nunca serán suficientes para agradecerte lo que has hecho por mí.
Me has dado fuerzas, me has enseñado quien era de verdad, que merezco un poco la pena, y que la próxima vez que me derrumbe tendré a alguien que me ayude a superarlo, alguien por el que merece la pena levantarse, por ver esa sonrisa tan maravillosa que hace que todo mi mundo se vuelva patas arriba, y que gire y gire como una peonza, espero que nunca deje de girar...
Ya puedo mirarme a los espejos y sonreir, no seré "el más guapo" ni "el mejor" en nada, pero para tí si lo soy, y eso me es suficiente.
Perdamos tiempo haciendo nada y haciéndolo todo, mírame a los ojos, esos ojos que me miran y me dicen que me quieren, esa mirada con la que nadie me había mirado antes, y es que ahora necesito más que nunca esa mirada, esos brazos que me abrazan pidiendo más, cuando apoyas la cabeza en mis hombros y sonríes... estaba tan contento, estaba tan feliz...
Solo te pido que vuelvas algún día, me sonrías y me digas "todo está bien, te he echado tanto de menos..." y que nos recorramos las calles de Madrid entre risas y tropiezos, mientras, seguiré recordando y recordando momentos, no se ya cuanto tiempo hace de la última que nos vimos, pero al imaginarte, me sigo enamorando.
No te olvides de mí, te necesito.
Ahora acompañame a este escenario que cada vez es más pequeño y en el que cada vez me siento más solo, todo lo que soy, todo lo que alguna vez quise ser, lo he conseguido contigo, no se cuando ni donde te veré la próxima vez, pero te buscaré... y nos tumbaremos olvidándonos del mundo, ¿Verdad?
Y el telón se cierra, mientras pateo el suelo, recordando.
